Después de un vuelo de poco más de cuatro horas, con una breve escala en Nebraska la Selección de Costa Rica arribó a la localidad de Hartford, Connecticut, sede en donde cerrarán la fase del grupo C, cuando el próximo martes 16 de julio enfrenten al equipo anfitrión, la Selección de los Estados Unidos.

Un viaje bastante tranquilo, pero desgastante, fue el trayecto que realizó durante la tarde y parte de la noche de este domingo la tricolor, con la diferencia que esta vez le toco compartir su travesía con la Selección de Estados Unidos.

“El traslado fue bastante normal, nosotros íbamos sentados en la primera mitad del avión y ellos atrás; no nos cruzamos palabra, ni mirada alguna”, declaro El Director Técnico Jorge Luis Pinto.

Con sed de revancha y de quedarse con la primera posición del Grupo C, llega el equipo costarricense a la localidad de Hartford, después de una sumar su segunda victoria en Salt Lake, pero que dejó un sinsabor.

“La propuesta antes Estados Unidos debe ser diferente y con un bloque menos defensivo. No me ha gustado que no se ven los goles, aunque las oportunidades se han dado, estamos trabajando para que haya más claridad ofensiva”, aseguró el estratega de la tricolor, quien además adelantó que ante los Estados Unidos utilizará la base de jugadores que estuvieron ante Belice y hará dos o tres cambios.

Y es que sin perder tiempo, antes de partir hacia Connecticut, la tricolor madrugó para, por espacio de hora y 30 minutos, realizar un entrenamiento intenso con los 12 jugadores que no estuvieron ante Belice.

“La idea de la práctica que hicimos antes del viaje era para que los muchachos no pierdan ritmo, y que todos estén a un cien por ciento para enfrentar a los Estados Unidos. Solamente le dimos un poco de descanso a los 11 que estuvieron de titulares ante Belice, pero se quedaron haciendo trabajos de recuperación en el hotel”, comentó Jorge Luis Pinto.

Para este lunes 15 de julio el equipo costarricense tiene programado un entrenamiento matutino en la cancha de Farmington Sports Arena, para por la noche reconocer las instalaciones del Estadio Rentschler Field.

Después de un vuelo de poco más de cuatro horas, con una breve escala en Nebraska la Selección de Costa Rica arribó a la localidad de Hartford, Connecticut, sede en donde cerrarán la fase del grupo C, cuando el próximo martes 16 de julio enfrenten al equipo anfitrión, la Selección de los Estados Unidos.

Un viaje bastante tranquilo, pero desgastante, fue el trayecto que realizó durante la tarde y parte de la noche de este domingo la tricolor, con la diferencia que esta vez le toco compartir su travesía con la Selección de Estados Unidos.

“El traslado fue bastante normal, nosotros íbamos sentados en la primera mitad del avión y ellos atrás; no nos cruzamos palabra, ni mirada alguna”, declaro El Director Técnico Jorge Luis Pinto.

Con sed de revancha y de quedarse con la primera posición del Grupo C, llega el equipo costarricense a la localidad de Hartford, después de una sumar su segunda victoria en Salt Lake, pero que dejó un sinsabor.

“La propuesta antes Estados Unidos debe ser diferente y con un bloque menos defensivo. No me ha gustado que no se ven los goles, aunque las oportunidades se han dado, estamos trabajando para que haya más claridad ofensiva”, aseguró el estratega de la tricolor, quien además adelantó que ante los Estados Unidos utilizará la base de jugadores que estuvieron ante Belice y hará dos o tres cambios.

Y es que sin perder tiempo, antes de partir hacia Connecticut, la tricolor madrugó para, por espacio de hora y 30 minutos, realizar un entrenamiento intenso con los 12 jugadores que no estuvieron ante Belice.

“La idea de la práctica que hicimos antes del viaje era para que los muchachos no pierdan ritmo, y que todos estén a un cien por ciento para enfrentar a los Estados Unidos. Solamente le dimos un poco de descanso a los 11 que estuvieron de titulares ante Belice, pero se quedaron haciendo trabajos de recuperación en el hotel”, comentó Jorge Luis Pinto.

Para este lunes 15 de julio el equipo costarricense tiene programado un entrenamiento matutino en la cancha de Farmington Sports Arena, para por la noche reconocer las instalaciones del Estadio Rentschler Field.