A raíz de los múltiples comentarios que se han dado en prensa escrita, radial, televisiva e internet, tras la eliminación de la Selección Sub-17 en el premundial de la CONCACAF en Jamaica, es importante aclarar varios aspectos para que el medio futbolístico valore la posición de la Dirección de Selecciones Nacionales en toda su dimensión.
En el proceso de las selecciones menores, a la hora de conformar un plantel, siempre caminamos en el objetivo de visualizar dentro de un amplio universo de futbolistas, sobretodo a aquellos que reúnen las mejores condiciones dentro de los estándares internacionales, para que se adapten a los sistemas tácticos empleados y a la idea del técnico.
El proceso de esta Selección Sub-17 la podemos dividir en dos partes claramente definidas: una primera parte con el técnico Randall Chacón y la escogencia de algunos jugadores; y una segunda etapa, de mayo del 2010 a la fecha, con el entrenador Luis Diego Arnáez, quien visualizó otro tipo de futbolistas para sus intereses, quedando algunos jugadores de la primera etapa por fuera, cambios llevados a cabo con el propósito de mejorar.
Una vez que finaliza la eliminatoria de la UNCAF en Guápiles, con dos victorias para Costa Rica, se inicia la etapa final hacia el premundial con un análisis minucioso de jugadores y con nuevas visorías para reforzar aún más el plantel. Este periodo fue marcado por entrenamientos de lunes a jueves, acompañado, además, con partidos de fogueo ante equipos de Segunda División (3).
A nivel internacional también se le dieron a la Infantil los fogueos suficientes y de exigencia para potenciar su rendimiento, todo pensando en el premundial de Jamaica, que recién finalizó. Se obtuvieron victorias contra Estados Unidos, Canadá (2 veces), Honduras de visita (2 victorias) y un triunfo contra Jamaica en el Caribe. También se le ganó dos veces a Haití y al El Salvador.
Con todo lo expuesto anteriormente quiero dejar por sentado que este equipo fue trabajado seriamente y no por casualidad logró una racha de 14 victorias, desde que arrancó el Torneo UNCAF hasta la eliminación ante Panamá, el pasado martes 22 de febrero.
Ciertamente la descalificación de la Sub-17 golpea el proceso de divisiones menores de la Federación Costarricense de Fútbol (Fedefútbol), pero no se lo trae abajo, eso de ninguna manera.
Hay detrás un trabajo muy serio, programado y estructurado que estamos realizando a nivel de selecciones regionales en todo el país, donde tenemos la seguridad que saldrá la cantidad y calidad de futbolistas para seguir siendo potencia en el área a nivel de selecciones Sub-17 y Sub-20.
Costa Rica es potencia en CONCACAF a nivel de estas categorías y por un mal resultado eso no va a cambiar. Los fanáticos del fútbol lo pueden ver de otra forma, pero en la Fedefútbol se trabaja con otro tipo de mediciones en el desarrollo de las divisiones menores.
Vamos hacia delante y lo sucedido que sirva de aprendizaje para corregir inmediatamente lo que no esté del todo bien. El medio nacional (entrenadores, dirigentes, afición, prensa) deben tener claro que los procesos de divisiones menores siempre requieren etapas de constantes análisis y modificaciones, porque se trabaja con futbolistas que todavía están en etapa de aprendizaje y desarrollo.
No es del todo aceptable que juzguen el trabajo realizado en estas instancias por un marcador adverso, que lastimosamente deja fuera al país del mundial de la categoría.
Hace un año y cinco meses la Fedefútbol y la Sub-20 eran lo mejor del área en el Mundial Juvenil de Egipto 2009 con un brillante cuarto lugar, y ahora para muchos nada sirve y todo está mal en las selecciones menores. Ese no es un razonamiento inteligente.
Rolando Villalobos Chacón
Director de Selecciones Nacionales
Federación Costarricense de Fútbol